Análisis y opinión. Los vituperios y calumnias del gobernador de Veracruz Cuitláhuac García Jiménez instigan a una lucha fratricida entre hermanos de clase

Ciudad de México a 26 de julio de 2023

A la opinión pública

Los dichos del gobernador del estado de Veracruz instigan a una lucha fratricida entre hermanos de clase, con calumnias y vituperios contra nuestra organización pretende justificar su proceder criminal y represivo, es él quien propala mentira tras mentira para embaucar a incautos y hace llamados subrepticios para pretender eliminar la solidaridad del pueblo hacia nuestras justas demandas de justicia, verdad, libertad, presentación y el derecho a la protesta.

Es una falsedad la afirmación del titular del Ejecutivo estatal al señalar que “esperamos que no sigan propalando las mentiras para que algunos pobladores, que los empujan a hacer este tipo de actos”, no se confunda señor gobernador, nosotros somos pueblo politizado, que luchamos por alejarnos de la indiferencia política y cuestionamos cada decisión gubernamental que atenta contra los intereses del pueblo trabajador, no hay ninguna coacción para protestar, la premisa que rige nuestra actividad política es la gravedad de los crímenes cometidos en nuestra contra.

En sus palabras hay un profundo desconocimiento del sentir popular, el pueblo no es un ignorante en política, sabe de las mentiras que propalan los políticos de oficio, percibe la demagogia con la cual pretenden engañarle, pero prefiere no opinar, cuestionar de forma silenciosa porque también es consiente que un grito aislado es fácil para el gobierno silenciarlo con el cometido de crímenes de lesa humanidad.

En las acciones de protesta no hay acarreo como sí lo hay en los actos proselitistas de los partidos políticos, no hay coacción en la actividad política de masas, ésta es propia de la política institucional de partidos y políticos de oficio, donde media el dinero como premisa de poder, por ello, todo lo corrompe y lo pervierte.

Son falsos golpes de pecho su llamado a “conminar a la población que no se deje engañar, se va a atender con justicia... apegado al proceso judicial y a la justicia”, porque es precisamente él quien ha propiciado un ambiente de injusticia social, es quien utiliza el derecho y la ley para arremeter contra quien no compagina con su política de gobierno.

Si llevamos más de cinco meses en plantón en la plaza Regina en la ciudad de Xalapa, es precisamente por su indiferencia e indolencia, por la soberbia gubernamental con la que se dirige ante la crítica política de nuestra organización. No puede argumentar que desconoce de nuestra actividad y de nuestras demandas, si a la fecha no atiende es porque ha tomado la decisión política de utilizar el estado de derecho como elemento de venganza política.

Al compañero Higinio Bustos Navarro no se le ha permitido una defensa justa, en automático se le cataloga como delincuente por el hecho de participar en una organización popular de carácter independiente, su caso no es tan mediático como otros, por ello, sólo mereció un espacio en la agenda institucional cuando el pueblo organizado decidió no soportar de manera pasiva una injusticia más y, por lo tanto, se vio precisado a realizar acciones políticas de masas como una expresión concreta del derecho a la protesta.

¿A qué justicia se ampara el gobierno estatal? ¿A aquella que construye una acusación a base de mentiras, que sustenta una infamia con artilugios leguleyos como la figura de testigo protegido? La justicia para el gobernador Cuitláhuac es aquella que se fraguó en un sexenio que ellos mismos han definido como traidores a la patria, con personajes con un historial amplio en el cometido de crímenes de lesa humanidad como son Genaro García Luna y Felipe Calderón Hinojosa.

Es verdad que el principio es apegarse a la justicia, pero hoy no cuestionan de igual manera la injusticia como cuando no se encontraban con la investidura institucional. Nos llama a aportar los elementos de prueba que demuestren la inocencia de nuestro compañero, sin embargo, tal fórmula jurídica viola el derecho de presunción de inocencia, en su afirmación ya hay una sentencia más allá del proceso jurídico, “hay un homicidio, debe haber responsables y no debe haber impunidad”, esto significa encuadrar todo a su verdad jurídica.

Es una descomunal mentira su conclusión de que “no tenemos nada en contra de nadie, nosotros lo que buscamos es construir la paz”, de lo contrario, de qué manera explica su política de oídos sordos, de nula atención de nuestras demandas. ¿Qué paz se puede construir con una actitud que no tolera la crítica política, que no es capaz de atender las necesidades populares y comete graves violaciones a los derechos humanos?

No se confunda señor gobernador, la paz no se construye con la imposición de medidas profascistas, éstas generan violencia institucional y el pueblo sólo responde ante las agresiones. Usted es testigo que nuestra actitud siempre fue de respeto político, pero de su administración no hubo reciprocidad y confundió la prudencia política con la actitud judeocristiana de poner la otra mejilla.

No existe paz en los hogares proletarios cuando la miseria y pauperización campean en el campo mexicano, en los cinturones de miseria de las grandes ciudades, por ello, resulta una perogrullada su axioma de que busca una “paz que dure, la paz que reivindique las verdaderas causas del pueblo que es atender la pobreza...”.

Atender las causas de la pobreza significa abolir la propiedad privada, eliminar la explotación económica y opresión política. Es falso que su llegada al gobierno del estado haya terminado con la imposición del neoliberalismo, las causas de los fenómenos socioeconómicos son las relaciones de producción del régimen capitalista y esta es la verdad más grande que políticos como usted quieren ocultar al pueblo trabajador.

Es claro que su visión de la paz pasa por el concepto mercantil, la paz no puede tasarse en fracción monetaria, mientras no se atienda el origen de la desigualdad social que emana de las contradicciones capitalistas, la miseria y pobreza se vivirá en los hogares proletarios. Los millones de pesos que se ufana el gobernador de repartir “entre los de abajo” no es la verdadera justicia, ello significa pretender paliar la precariedad social.

No corresponde al gobernador afirmar si reprime o no, son los miles de testimonios que hablan de las acciones de un gobierno. No es casualidad que los titulares de ejecutivos estatales de Veracruz, Chiapas, Michoacán, Guerrero, Tabasco, entre otros identificados en Morena emergen con una faceta represiva, con una vocación criminal en cuya administración aumentan los casos de violaciones graves a los derechos humanos.

Es incongruente su llamado de que espera contar con los que están de acuerdo con atender las causas de la pobreza, porque por más de cinco meses no se ha dignado a escuchar nuestras demandas. Esa actitud representa autoritarismo y pedantería porque no toleran opiniones que difieran a su programa de gobierno, que no atiende las causas, sino que pretende maquillar la explotación y opresión capitalistas.

Veladamente vierte su amenaza y descalifica nuestra lucha, para él sólo aparentamos representar reivindicaciones sociales. En su lógica, sólo es apariencia la demanda de presentación con vida de los detenidos desaparecidos, la libertad de presos políticos, el cese de la persecución política y la represión contra el pueblo organizado de forma independiente.

Es muy estrecho el horizonte con el que analiza los fenómenos sociales o es asesorado de manera irresponsable, nuestra trayectoria política es de amplia data y no aparentamos luchar por mejores condiciones de vida, éstas las hemos logrado a través de la movilizacion, denuncia y acciones políticas de masas.

No es con calumnias, vituperios y amenazas como se resuelven los problemas sociales, no es con alentar a la confrontación entre hermanos de clase como se consiguen soluciones duraderas. La solución pasa por investigar el cometido de violaciones graves a los derechos humanos y crímenes de lesa humanidad para erradicarlos.

La violencia es la que emana de las instituciones gubernamentales, el pueblo sólo hace acto del legítimo derecho a la protesta para salvaguardar la integridad colectiva. La razón nos asiste, la justeza de nuestras demandas está en que buscamos proteger la vida e integridad de quienes están organizados en torno al FNLS. A ustedes les importa más el sucio e interés mezquino del dinero.

La foto de la conferencia de prensa durante la sesión de la COORDINACIÓN ESTATAL PARA LA CONSTRUCCIÓN DE LA PAZ es muy ilustrativa, el gobernador de Veracruz está acompañado por un representante del Ejército mexicano, de La Marina, La Guardia Nacional, la Fiscalía General del estado de Veracruz, Secretario de Gobierno de la entidad, es la expresión concreta de la existencia del Estado policíaco militar, respaldado por un estado de derecho oligárquico.

El mensaje mediático es claro, en Veracruz se gobierna a través de la estructura policíaca y militar, que durante décadas ha reprimido al pueblo. La misma que se encargó de ejecutar los crímenes de lesa humanidad en los gobiernos priistas y panistas.

Atentamente
¡Por la unidad obrera, campesina, indígena y popular!

Frente Nacional de Lucha por el Socialismo
FNLS