Portada del sitio > Distrito Federal > ¡La cultura proletaria, para el pueblo es necesaria!

¡La cultura proletaria, para el pueblo es necesaria!

Sábado 11 de abril de 2020, por Ciudad de México

Ciudad de México a 11 de abril de 2020

A la opinión pública

El conocimiento como tal y la cultura no albergan el enemigo a vencer, la universalidad de la ciencia no debe verse como un mal cuasi demonio al que hay que rehuir, tal actitud refleja una profunda aversión a la teoría, y como ésta tiene sus fundamentos en la práctica, también manifiesta la repulsa al esfuerzo físico.

El Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (FNLS) está consciente de que la conciencia de clase no se da en las universidades ni en las instituciones de educación pública, pero ello no significa que llamemos a quemar los centros universitarios por considerar que en ellos se forman sentimientos contrarios a las necesidades populares, el conocimiento universal siempre manifestará un salto cualitativo respecto a las concepciones tradicionales y atrasadas.

No renegamos el conocimiento milenario que existe en pueblos y comunidades porque éste tiene fundamento en las premisas de la experimentación, no obstante, dado el desarrollo de las fuerzas productivas no podemos darnos el gusto de seguir con el método de prueba y error, existen principios generales que deben hacer la vida más llevadera para las masas trabajadoras.

El hecho que los profesionistas no regresen a sus comunidades a ejercer sus conocimientos se debe a muchas razones, pero la primera es que la incorporación al conocimiento profesional tiene una proyección elitista, sin embargo, ello no es motivo para considerar que los egresados en automático sean corruptos, de ser así, no habría profesionistas con amplia sensibilidad humana, muchos de ellos abandonan el título nobiliario para dedicarse a la construcción de la organización popular.

Jamás defendemos el lucro o la presunción con el título nobiliario, el universitario, el indígena, campesino u obrero tienen respectivas capacidades que los hacen únicos. Quien utiliza esa condición para vanagloriarse, es bueno que reflexione ¿Qué acto heroico ha cometido? ¿Una licenciatura, maestría o doctorado es suficiente para que alguien sienta que no pisa el suelo? Desde luego que no, siempre debe existir la sencillez entre hermanos de clase.

En el FNLS hay una exigencia, observar una actitud adecuada ante el trabajo y el estudio, en cualquier aspecto de la vida social en el que nos desempeñemos debemos procurar ser brillantes, no para ser soberbios con el conocimiento adquirido, sino porque de esa manera está en mejores condiciones para abonar a la construcción de la organización popular.

Condenamos enérgicamente la mediocridad y esto no tiene nada que ver con la soberbia, pero un hijo de campesino, indígena o ama de casa no debe conformarse con lo limitado de su formación tradicional, debe y puede superar ese escollo al que lo condujeron las relaciones que oprimen a las masas trabajadoras. Es verdad, en el FNLS ha estado elementos que no comulgan con este principio porque suponen que la actividad política es la fuga perfecta para la exigencia en la preparación teórica y práctica.

De qué sirve un licenciado en Derecho que no tenga en mente litigar, porque una necesidad es que tenemos presos políticos y es preciso oponer una defensa contundente en ese tenor; un médico que no tenga la vocación de atender en las condiciones de pobreza en las que está nuestro pueblo; un licenciado o con maestría en historia que no sea capaz de observar con ojo crítico los acontecimientos en nuestro país o utilice su formación académica para descalificar y tergiversar la historia del pueblo, una lista interminable de sujetos que no “encuentran” relación de su profesión con las necesidades populares.

En el FNLS hay profesionistas que encuentran el vínculo exacto entre sus conocimientos y las necesidades de las comunidades, que se incorporan a resolverlas sin tantos aspavientos. También es verdad que hubo quienes se enfrentaron a la interrogante, ¿de qué voy a vivir?, pero el pueblo no deja a la deriva a quien coadyuva a la solución de sus problemas.

El progreso y desarrollo al que nos atenemos es al que avanza la humanidad producto de tránsito dialéctico de la materia, y como tal, del conocimiento sobre ella. Hemos llegado a un momento donde este avance se encuentra en una contradicción, donde priva la propiedad privada de los medios de producción, la ciencia no representa los intereses de las masas trabajadoras, por ello, son ellas las que están llamadas a resolver esa contradicción.

Una patraña sobre otra, como buenos arquitectos, hay sujetos que crearon una pared colorida de mentiras y calumnias. Colocan datos históricos que faltan a la verdad, sin embargo, si quisiéramos dar el beneficio de la duda, justo es que respondan, si toda esa es la historia de un proyecto que dicen llamar “La casa Lenin-Multiversidad de la vida”, ¿por qué dejaron morir el proyecto estudiantil popular? deben reconocer que hace algunos años dejó de ser albergue estudiantil.

Fueron sus conceptos medievales que les condujo a considerar que un universitario formado en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) es un enemigo del pueblo. Ahora sí se volaron la barda, ahora resulta que cuales curas de la Edad Media llamen a hacer culto a la ignorancia, a los conceptos arcaicos y casi literalmente inciten a la quema de todo lo que represente el conocimiento científico.

No cuestionamos sus métodos, la práctica se encargará de ilustrar la veracidad de los mismos. Pero la pregunta sigue sin ser respondida ¿por qué sepultaron el proyecto de albergar a estudiantes para su formación profesional? ¿por qué tienen aversión al conocimiento científico universal? Discutamos, pero sin calumnias ni mentiras.

Atentamente
Frente Nacional de Lucha por el socialismo
FNLS

Portafolio

¿Un mensaje, un comentario?

moderación a priori

Este foro es moderado a priori: su contribución sólo aparecerá una vez validada por un/a administrador/a del sitio.

¿Quién es usted?
Su mensaje

Para crear párrafos, deje simplemente líneas vacías.