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La violencia institucional es contra el ser genérico
Viernes 26 de julio de 2024, por
Ciudad de México, a 26 de julio de 2024
A la opinión pública
La violencia institucional no se ejecuta de manera exclusiva contra un sexo o un sector del pueblo, sino contra el ser genérico; contra la especie humana que vive a diario el cometido de crímenes de Estado y de lesa humanidad, con lo que se viola de manera flagrante los derechos humanos reconocidos a nivel internacional como bienes jurídicos que compartimos los seres humanos en cualquier latitud del mundo. Violencia de clase que se dirige contra hombres y mujeres que pertenecen a la clase trabajadora.
Desde el Estado se impulsa una visión sexista sobre la violencia; es decir, se genera la idea que la violencia surge desde el hombre contra la mujer y es éste el que la despliega a otros espacios de la vida social, bajo dicho argumento se tergiversa la realidad en la que vivimos las masas trabajadoras y genera una lucha entre hermanos de clase.
Se trata de evitar que hombres y mujeres se reconozcan como parte de una clase social, que comparten una misma condición económica y social que los condena a vivir en condición de pobreza y miseria. De ahí que, desde la academia, el indigenismo… se beba de las fuentes de la ideología burguesa y bajo teorías “modernas” e “innovadoras”, se asuma la posición reaccionaria del gobierno y se repita lo que se dice combatir.
Desde la paridad de Género, el gobierno federal impulsa la imagen que en su gobierno se promueve la igualdad entre hombres y mujeres, que existe la participación del 50% de mujeres y 50% de hombres, como si esto representara una transformación de las condiciones de existencia de las masas trabajadoras.
Actitud que el presidente “virtual” repite. Con la declaración de la doctora Claudia Sheinbaum Pardo sobre erradicar la violencia contra las mujeres, devela la posición de clase que sostiene. Dicha declaración es burda, porque para erradicar “la violencia contra las mujeres” tiene que transformar el régimen económico y político actual.
Transformación radical, que no tiene la intención de iniciar, porque los intereses que ha decidido defender son los intereses oligarcas. El señalamiento de erradicar la violencia a secas contra las mujeres se refiere a mantener la violencia de Estado contra las masas trabajadoras, porque no reconoce que la violencia la monopoliza el Estado y la extiende a la vida pública del país.
La mujer, no es un ser en abstracto, pertenece a la clase trabajadora o a la clase que detenta el poder, y el interés que defiende la Dra. Sheimbaum es el de los oligarcas, la muestra está en el encuentro que sostuvo con Carlos Slim, principal oligarca del país, con el que seguramente reafirmo el compromiso adquirido.
Es ilógico hablar de una violencia de género, si en los hechos la violencia se dirige contra hombres y mujeres, que viven a diario explotación económica y opresión política generada desde el proceso productivo y que se extiende desde la ideología y las instituciones del Estado a otros ámbitos de la vida social.
Con el reconocimiento de una violencia a secas, y del hombre contra la mujer, se niega al responsable de la violencia que se dirige contra las masas trabajadoras: el sistema económico y político que surge con la apropiación de los medios de producción, la concentración de la riqueza social en unas cuantas manos, la división social entre explotados y explotadores.
Con el surgimiento del Estado, el gobierno se convertiría en la representación de la clase social que echaría a andar la maquinaria institucional que garantizaría la concreción de los intereses económico, políticos, sociales y militares con los que sometería a los trabajadores del campo y la ciudad y los convertiría en esclavos modernos.
Situación que en nuestro país se mantiene, la muestra está en el enriquecimiento desmedido de unas cuantas familias de empresarios, mientras que las masas trabajadoras que producen las riquezas del país viven en condiciones indignas; de pobreza y miseria, sin la satisfacción de las necesidades básicas para el desarrollo de todo ser humano.
La violencia de clase nace y se sostiene desde la apropiación de los medios de producción que hacen los grandes empresarios, porque es por medio del robo, del producto de la fuerza de trabajo como los grandes empresarios han obtenido sus ganancias y beneficios personales.
La violencia a la que desde la institucionalidad se hace referencia, es violencia de clase la cual se dirige de manera continua y velada contra la clase trabajadora; contra mujeres y hombres de los sectores populares. Son obreros, campesinos, indígenas, estudiantes, profesionistas…las víctimas de la violencia institucional, la cual tiene sello de clase.
Desde la oficialidad se vierten la idea que es el hombre el que violenta a la mujer, dicho con el que se protege a los responsables del cometido de las desapariciones forzadas ejecuciones extrajudiciales, desplazamientos forzados, tortura, tratos crueles inhumanos y degradantes… para que estos se mantengan en la impunidad y actúen bajo el cobijo de la ley burguesa.
El gobierno federal mantiene un discurso perverso y reaccionario para mantener el control de la población, conducir al pueblo a una lucha fratricida e impedir la unidad entre trabajadores del campo y la ciudad, por lo que la tarea permanente es analizar bajo sentido crítico la práctica del gobierno federal como criterio de la verdad.
Fraternalmente:
¡La violencia es de Estado, no de genero!
¡Por la unidad Obrera, Campesina, Indígena y Popular!
Frente Nacional de Lucha por el Socialismo
FNLS