La política burguesa eleva a la mujer como un ente incorruptible

Ciudad de México, a 16 de abril de 2024

A la opinión pública

Funcionarios, políticos de oficio y partidos electorales elevan a la mujer como un ente incorruptible, sin embargo, las candidatas a diferentes cargos públicos y de "representación popular" son producto del régimen, cuya presencia en la política institucional obedece a la defensa a ultranza de los intereses económicos y políticos de la burguesía.

La mujer no es un sector especial de la población, no es un ser sacrosanto e incorruptible, como para afirmar que con una mujer en la presidencia de la república los males del país van a desaparecer; es un ser que responde a las necesidades e intereses de una clase en particular en un contexto histórico determinado. En la vida política del país va a coadyuvar al sometimiento de otra clase o a la liberación de su pueblo.

Es mentira que por el hecho de que una mujer asuma un cargo en una institución gubernamental la situación del país va a mejorar o las condiciones de vida se van a transformar, discurso con el que se pretende superar el abstencionismo electoral por lo que se crea la imagen de la mujer incorruptible y se intenta convencer que las candidatas a diferentes puestos de elección son pieza clave para el desarrollo del país.

Indicativo de la mercantilización de la imagen de mujer para crear simpatía y aceptación entre la población de la democracia burguesa y mantener intacto el régimen económico y político. En el fondo se fortalece el sometimiento de la mujer y se utiliza para intereses de lucro, ésta es útil para satisfacer deseos y necesidades burguesas.

Mediáticamente se exalta el feminismo burgués para desviar la lucha de clases que existe en nuestro país y confrontar a hombres y mujeres en una lucha fratricida que los aleja de la unificación de esfuerzos en la lucha por superar las condiciones oprobiosas que genera el régimen económico y político.

Ejemplos sobre el actuar de las mujeres en beneficio de los intereses empresariales son bastos, a nivel internacional como nacional existen ejemplos de mujeres que se alinean a la política del imperialismo para someter a los pueblos del mundo.

En 1995 en la masacre cometida contra 17 campesinos en Atoyac, Guerrero contra integrantes de la Organización Campesina de la Sierra del sur (OCSS) la presidencia municipal estuvo a cargo de María de la Luz Núñez Ramos, quien no movió ni un dedo para esclarecer los hechos del crimen cometido, mucho menos enjuició y encarceló a los responsables de esta masacre. Acción que constituye prueba fehaciente de la alienación de políticos de oficio en la política de gobierno, sin importar sexo, estos se ponen al servicio de los intereses privados.

El actuar de la gobernadora del estado de Guerrero Evelyn Salgado es otro de los ejemplos que ilustran el servilismo que las mujeres burguesas o de la pequeña burguesía muestran al ser parte de la política burguesa, al identificarse con la ideología del sistema sus actos se dirigirán a mantener el actual sistema económico.

Las candidatas a la presidencia de la república son una figura mediática al servicio del capital, cada una representa a una parte de la burguesía nacional y extranjera, por lo que sus intereses no son los mismo que los intereses populares, por mucho que de su boca salgan discursos emotivos o de transformación, ninguna de ellas se identifican con las causas justas del pueblo.

La mujer no es un ente incorruptible, está propensa a denigrar su esencia humana; al crecer y desarrollarse dentro de un sistema que todo lo pervierte y lo traduce en su contrario reproduce de manera inconsciente los vicios del sistema, por lo que las que somos parte de la clase trabajadora tenemos la tarea permanente de transformarnos y en liberarnos no sólo de la explotación económica y opresión política que nos impone el régimen sino de la ideología del sistema que trastoca la identidad de los trabajadores del campo y la ciudad.

Por lo tanto la mujer que no tiene conciencia de transformar las condiciones de existencia material para el desarrollo de la humanidad será presa fácil de reproducir las prácticas de la política burguesa, porque no basta con tener buenas intenciones, de lo que se requiere es tener la disposición de coadyuvar al proceso de transformación que requiere la humanidad en su conjunto.

Se requiere hombres y mujeres dispuestos a enfrentar las condiciones que surgen en el proceso de lucha para arribar a una forma superior de organización de la humanidad, necesidad que surge ante la violencia de Estado que se ceba contra las masas trabajadoras. Hombres y mujeres estamos llamados a hacer ese esfuerzo por superar el modo de producción actual.

Fraternalmente:
¡Por la unidad Obrera, Campesina, Indígena y Popular!
Frente Nacional de Lucha por el Socialismo
FNLS