La Plaza Base como un Derecho Irrenunciable

Michoacán, a 1 de febrero de 2024

A los medios de comunicación
Al pueblo de Michoacán, México y allende las fronteras

La Plaza Base como un Derecho Irrenunciable

Ante la denuncia de parte de las normales del estado de Michoacán, el Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (FNLS) se pronuncia contra la convocatoria de la USICAMM por ser lesiva a los derechos de los trabajadores de la educación y atentar contra el derecho de la niñez mexicana a la educación.

El artículo 5º y 123 constitucional dicta que toda persona tiene el derecho al trabajo y no podrán establecerse mecanismos condiciones laborales que atenten contra la dignidad humana, por su parte, el artículo 7° del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales reza que el trabajo debe asegurar la remuneración, salarios, condiciones de trabajo seguras y saludables, igualdad de oportunidades (sin más consideraciones que las de antigüedad y competencia) y el descanso y vacaciones pagadas y retribuciones.

Tanto la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en su artículo primero y el artículo sexto del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales mencionan la obligación del Estado Mexicano de implementar políticas públicas para garantizar el trabajo como un medio para hacer posible el desarrollo económico. Por su parte, el artículo 30 de la Declaración Universal de los Derecho Humanos prohíbe toda práctica u acto que tienda a suprimir o anular este derecho.

En conclusión, el acceso al trabajo a través de la PLAZA BASE, es un derecho humano y constitucional que garantiza la protección a la dignidad del docente, el acceso a la seguridad social, el mejoramiento de las condiciones laborales, la realización de otros derechos fundamentales como la alimentación y el alcance de la justicia social. En materia del Derecho del Trabajo, la plaza base contribuye a hacer del trabajo un derecho y deber social, ayudando a cumplir sus fines y principios en beneficio y protección de los trabajadores de la educación; que de manera recíproca, bajo el principio de interdependencia, garantizar buenas condiciones laborales contribuye a garantizar la educación del pueblo mexicano.

El otorgar plaza base es una obligación del Estado Mexicano, máxime cuando se trata de maestros egresados de las escuelas normales, donde reciben una formación integral y pedagógica que los convierte en docentes aptos para llevar la educación a las comunidades rurales, colonias populares y demás sectores de los oprimidos y explotados.

A raíz de la entrada del neoliberalismo en nuestro país, la imposición de los programas, leyes e instituciones como la Carrera Magisterial, el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), la Ley General del Servicio Profesional Docente y la Unidad del Sistema para la Carrera de las Maestras y Maestros (USICAMM), han provocado la anulación del derecho a la plaza base obligando al trabajador de la educación, a navegar entre procesos burocráticos, la incertidumbre laboral a través de contratos temporales y sin garantía de pago, salarios precarios y falta de pago de estos mismos y la anulación de prestaciones y derechos laborales como lo es la antigüedad.

La supuesta “revalorización del magisterio” ha consistido en la pretensión de anular el sindicalismo independiente y los derechos sindicales de los trabajadores de la educación. A través de la USICAMM se busca desaparecer a la Coordinadora de Trabajadores de la Educación (CNTE) como organismo político-organizativo de los trabajadores de la educación. Por lo que las declaraciones sobre el combate a la corrupción y el “huachicoleo de plazas”, han sido parte de la ofensiva en contra del magisterio democrático.

Por lo tanto, la USICAMM es un acto anticonstitucional que viola los derechos humanos y constitucionales de los trabajadores de la educación. Difícilmente puede hablar de una educación de calidad o de excelencia cuando los trabajadores de la educación viven bajo la precariedad e incertidumbre laboral y a los egresados de las escuelas normales se les niega el derecho a trabajar.

Pese a que desde las voces oficialistas se pretende justificar la imposición de la USICAMM como una ley contra la que no se puede hacer ya nada; cuando las normas o leyes no garantizan el bienestar de los trabajadores, estos tienen el derecho a oponerse en tanto que dichos ordenamientos son causa de la precariedad y la miseria que embarga a las mayorías. Por lo tanto, la oposición y rechazo a la USICAMM está justificada, pues de conformidad con el artículo 39 constitucional, el pueblo mexicano tiene el derecho inalienable de alterar o modificar su forma de gobierno, o sea, que goza del derecho de exigir la derogación de las reformas neoliberales que laceran a nuestro pueblo.

Bajo este respaldo constitucional, toda acción de protesta, la realización de jornadas de lucha y de acciones políticas de masas constituyen verdaderos instrumentos de lucha para defender el derecho a la plaza base y otros derechos sindicales y laborales. Por lo que desde el FNLS expresamos nuestra solidaridad a la lucha de las escuelas normales del estado contra la convocatoria emitida por la USICAMM y el gobierno estatal de Alfredo Ramírez Bedolla.

Atentamente:
Por la Unidad Obrera, Campesina, Indígena y Popular

Frente Nacional de Lucha por el Socialismo
FNLS