A Diez Años del Euromaidan y ascenso del fascismo en Ucrania

México, a 23 de noviembre de 2023

A los medios de comunicación nacionales e internacionales
Al los pueblos del mundo

A Diez Años del Euromaidan y ascenso del fascismo en Ucrania

El21 de noviembre de 2013 iniciaron las protestas de parte de grupos fascistas, reaccionarios y pro imperialistas por la decisión del entonces gobierno de Ucrania de suspender su adhesión a la Unión Europea (UE). A partir de este momento se desarrolló una escalada de violencia que culminó en un golpe de Estado auspiciado por los Estados Unidos, la UE y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) que condujo a la imposición del régimen fascista actual en Ucrania.

Las protestas en la capital de Ucrania mostraron ante el mundo el resurgimiento del fascismo y el espíritu reaccionario y salvaje de quienes pretendían consumar las pretensiones del imperialismo al anexionar Ucrania a la UE, a la distancia se observa con basta claridad que el objetivo siempre fue utilizar a los ucranianos como punta de lanza contra Rusia para hacer realidad los planes de aniquilación ideados desde los años 40’s del siglo pasado contra la entonces Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS). La destrucción de importantes símbolos para el pueblo ucraniano y ruso demostraron la intención de borrar toda una historia que hermana a los pueblos de ambas naciones, la cual incluye el periodo de rescate de la cultura ucraniana por medio de la política soviética de korenización o indigenización y la construcción de la unidad del pueblo que conformaba la URSS.

De esta manera los ideologos del Euroamidan tergiversaron la historia llamando "ocupación soviética" a la hermandad construida al interior de la Unión Soviética y levantan como héroes del pueblo ucraniano a criminales de guerra, fascistas y colaboracionistas de la Alemania nazi como Stepan Bandera. Bajo estas mentiras están construidos los valores de la Ucrania fascista.

Como siempre ha sido su práctica común, los monopolios de la comunicación dieron respaldo mediático al Euromaidan disfrazándolo como un movimiento popular y revolucionario, mientras tanto, líderes y representantes del imperialismo norteamericano y europeo dieron su total respaldo llegando a pisar suelo ucraniano. Dado que en política no existen casualidades, las acciones y presencia de dichos personajes muestran el grado de injerencia del imperialismo en este movimiento que contó con asesores, agentes, armamento y un millonario financiamiento de parte de la UE, la Casa Blanca y una parte de la oligarquía nacional y extranjera, lo cual permitió escalar la violencia hasta regar las calles de Kiev con la sangre del pueblo ucraniano.

Fue el derramamiento de sangre y la presión del imperialismo los que impusieron en el poder a los fascistas ucranianos y consolidaron el golpe de Estado, quienes habiéndose una vez consolidados iniciaron con la persecución y criminal represión con las fuerzas armadas hacia sus opositores, enaltecieron el fascismo como parte de la nueva cultura ucraniana, promovieron la rusofobia y la segregación y el cometido crímenes de lesa humanidad contra su mismo pueblo como la masacre en la Casa de los Sindicatos en Odessa. Este mismo gobierno ha acusado a los pueblos del Donbás de terroristas por el hecho de no aceptar al gobierno golpista y luchar de manera legítima por su independencia, de esta manera desataron una guerra injusta contra la República Popular de Donietsk (RPD) y la República Popular Lugansk (RPL).

Pese a los esfuerzos por construir la paz y detener el derramamiento de sangre como lo fueron los Acuerdos de Minsk en 2015, los fascistas ucranianos realizaron todo para sabotearlos y continuaron con las masacres ante la mirada indolente y cómplice de la UE y los Estados Unidos. Ante ello y a petición de los pueblos del Donbás y varias regiones del este de Ucrania, el gobierno ruso ejecutó la Operación Especial Militar para Desnazifica y Desmilitarizar Ucrania, acción que tiene sustento en el derecho internacional, concretamente en el derecho de las naciones a la legítima defensa estipulada en el artículo 51 de la carta de la ONU.

Las acciones legítimas del gobierno ruso provocaron la ira del imperialismo, pues con ellas fueron frenadas las pretensiones de quienes buscan imponer su dominio sobre otros pueblos, si la guerra persiste es porque desde la UE y los Estados Unidos se continúa alimentando con armamento y dinero a los fascistas ucranianos, tal y como lo hicieron con sus antecesores que dieron vida al Euromaidan.

Para no caer en las mentiras y calumnias lanzadas desde los monopolios de la comunicación, recordar la historia es importante para no ser objeto del engaño propio y ajeno. Quienes luchamos por la libertad y emancipación de nuestros pueblos estamos obligados a condenar el fascismo en todas sus expresiones y brindar la solidaridad para quienes se encuentran en las primeras filas combatiendo a este enemigo de la humanidad.

Atentamente:
Por la Unidad Obrera, Campesina, Indígena y Popular

Frente Nacional de Lucha por el Socialismo
FNLS