Análisis y opinión. “Otis” expresó la indolencia gubernamental, el oportunismo de políticos de oficio y el afán de lucro de empresarios

Ciudad de México a 10 de noviembre de 2023

A la opinión pública

El huracán Otis que impacto en las costas de Guerrero expresó la tragedia humana que enfrenta el pueblo trabajador en un fenómeno de esta naturaleza, a la vez, manifiesta las indolencia gubernamental, el oportunismo de políticos de oficio y funcionarios para obtener votos cautivos en la próxima contienda electoral.

La tragedia humana dejó de manifiesto el afán de lucro de empresarios y cadenas televisivas para hacer de una catástrofe de esta naturaleza una forma de incrementar sus ganancias, a través de sus fundaciones hacen circo, maroma y teatro para disfrazar la supuesta ayuda social y con ello condonar sus impuestos, se atreven a decir públicamente que “ellos sí saben cómo hacerlo”, en alusión a los actos gubernamentales parta enfrentar el problema presente.

El gobierno mexicano aprovecha la tragedia para enviar más elementos policíacos y militares para mantener “la paz y el orden” en la entidad guerrerense, motivo por el cual decidieron implementar un cuartel de la Guardia Nacional en cada colonia de Acapulco; OTIS fue el momento perfecto para hacer de la militarización una forma de existencia de los guerrerenses.

El hecho de que la Guardia Nacional tome el control de la seguridad en las colonias más pobladas de Acapulco, luego del paso del huracán OTIS, por considerar que es el tercer municipio más violento de México y donde se “vaciaron” las tiendas y supermercados, comprueba en los hechos que los cuerpos policíacos y militares no están para proteger al pueblo trabajador, sino para proteger los intereses de empresarios y oligarcas en el país. Expresa que el gobierno federal hace de la militarización una forma de gobernar, una forma de mantener su política a través de la bota militar.

La pretensión de construir cuarteles de la Guardia Nacional en cada colonia es la expresión de más militarización, ésta existe a pesar de los discursos que emanan de Palacio Nacional. Manifestación de esa política también es canalizar toda la ayuda a los damnificados a través del ejército por orden presidencial, éste es el encargado de concentrar y distribuir la solidaridad del pueblo.

La respuesta del gobierno federal a la tragedia social es enviar miles de elementos policíacos y militares a las colonias populares de Acapulco, práctica gubernamental con la que se fortalece la militarización y confirma que la política del gobierno federal es darle más y más poder a la Secretaría de la defensa Nacional (SEDENA).

Lo objetivo es que quienes resultaron más afectados por el huracán Otis son los que viven en las colonias populares de Acapulco, los hogares donde habitan los asalariados fueron devastados, lo mismo sucedió con las poblaciones de pueblos y comunidades de más de 10 municipios, hasta hoy siguen en el olvido, no son motivo de nota periodística, informativa o de análisis, menos de la ayuda.

La zona turística fue golpeada, no se puede negar, es la única que tiene en estos momentos la atención de medios de comunicación, políticos de los diferentes partidos, los gobiernos municipal, estatal y federal, como siempre los empresarios se proyectan como damnificados y exigen mayores prerrogativas al gobierno, en cambio el pueblo trabajador vive con la ilusión de que los apoyos gubernamentales lleguen en sus hogares.

Las cadenas televisivas lucran con la desgracia humana, proyectan sus paleros para realizar crítica visceral al gobierno federal, repiten una y mil veces mentiras sobre los hechos ocurridos en Guerrero. Proyectan imágenes que impacten en los televisores, ahí se desgarran para decir que se vive una tragedia humana, en cambio, no sacan las imágenes de la población devastada por el genocidio que comete el Estado sionista contra el pueblo palestino, sólo proyectan las imágenes afines a los intereses imperialistas, lo que hacen evidencia la doble moral con la que se conducen.

Desde las empresas televisivas se promueve una visión catastrófica de los empresarios, los hacen ver como las víctimas para que sean beneficiados ampliamente en el programa de rescate a Guerrero. TV Azteca no aboga por los guerrerenses, aboga por el rescate de sus empresas en esa entidad federativa.

La candidata del Frente Amplio por México (FAM), Xóchitl Gálvez quien aspira a la presidencia del país, resulta ruin su actitud en torno a la desgracia del pueblo, hace política a través de la ayuda humanitaria, a unos días de haber pasado el huracán Otis, en las oficinas de la Cruz Roja Mexicana le dijeron, “aquí se viene a ayudar no a hacer política”; los hechos reflejan que hace política a través de la ayuda humanitaria para posicionarse en la próxima contienda electoral y ganar votos.

Ante una tragedia por el fenómeno Otis en Guerrero quieren presentarse como los interesados en resolver la situación que azota la entidad, no obstante, ¿por qué no han hecho nada para erradicar la pobreza que afecta los hogares proletarios en Guerrero y en toda la entidad nacional?, se observa como oportunistamente aprovechan una catástrofe de esta naturaleza para generar simpatía en el pueblo trabajador.

Lo mismo sucede con la presidenta municipal de la alcaldía Cuauhtémoc, quien anuncio en las redes sociales, “voy a dejar de comprarme ropa tres meses, que sabe que me encanta comprar ropa” para apoyar a los damnificados de Acapulco; como si fuera un acto heroico no comprarse ropa, ahora lo presume con frivolidad y la actitud consumista de un político de oficio que no tiene el mínimo conocimiento de lo que es la vida de un proletario, de lo que es vivir con sólo 240 pesos al día para alimentar a una familia de cinco elementos.

Declaraciones cínicas e hipócritas de una alcaldesa que en otras ocasiones ha declarado que no le gustan los pobres y le encanta portar marcas caras como Hugo Boss, Dolce y Gabbana, Versace, Entrenador, Carolina Herrera o Armani, atuendos que tienen un precio de más de 35 mil pesos y cuando la han cuestionado por sus gustos caros su respuesta es: para eso trabajo. A costa del erario público se da gustos caros, sin importarle en lo mínimo que otros no tengan ni para comer, en su comentario les dice holgazanes a la prole por no trabajar como ella para comprarse prendas caras.

En sus concepciones hace apología al fascismo, ha dicho abiertamente tener afinidad por Nayib Bukele, presidente de la República de El Salvador, país donde ha impuesto su política de gobierno a través de prácticas fascistas; lo mismo ha expresado por la policía norteamericana, modelo que quiere aplicar en la capital del país si llega a ser gobernadora.

La gobernadora de Guerrero Evelin Salgado expresa la ineptitud y falta de capacidad política para enfrentar los costos del desastre nacional, en lugar de atender una emergencia estatal se dedicaron a brindar aplausos al señor presidente, en los hechos reclama una actitud paternalista para evitar el naufragio político en Guerrero.

Su gestión administrativa arrastra fuertes problemas producto de la violencia institucional, a través de desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales, detenciones arbitrarias y desplazamientos forzados, así como la pobreza que azota en los hogares proletarios y campesinos.

La alcaldesa de Acapulco, Abelina López Rodríguez, denota desconocimiento sobre los problemas sociales y económicos que viven los guerrerenses al llamar “cohesión social” a los actos de los ciudadanos por obtener productos mercantiles y alimentos de las tiendas departamentales para poder sobrevivir. Esos productos no eran mercancías propiamente dichas para el empresario, ya eran pérdida total a cubrir por los diferentes seguros, por tanto, no podemos hablar que el pueblo robe al empresario, no se puede hablar de rapiña o saqueo.

Aun así políticos de oficio insisten en que es tiempo de las mujeres, como si fuera un acto heroico, no obstante, lo que interesa son las capacidades para administrar entidades federativas o municipios que atiendan las necesidades de las masas trabajadoras.

La alcaldesa de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández, expresó frivolidad política y actitud antihumana al celebrar a lo grande su segundo informe de gobierno, en plena tragedia de algunos municipios de la entidad guerrerense que quedaron devastados por el huracán Otis. Acto público en el que hubo derroche de recursos públicos y fuegos artificiales, se nota que no le interesa en lo más mínimo la tragedia social que viven los guerrerenses. Político de oficio que expresa nimiedad, está más preocupada por su aspecto personal que por atender los problemas de pobreza y miseria que aquejan a los guerrerenses en el municipio de Chilpancingo.

El huracán Otis y sus consecuencias pone al descubierto que el México contemporáneo, en específico en Guerrero, existe una minoría que concentra la riqueza y vive en la opulencia, ese es el Acapulco de los turistas; por otro lado, existe una amplia mayoría conformada por hogares marcados por la pobreza, ese es el Guerrero de los que viven en la pobreza y miseria, de éstos sólo son estadística en tiempos electorales.

Atentamente

¡Por la unidad obrera, campesina, indígena y popular!
Frente Nacional de Lucha por el Socialismo
FNLS