Portada del sitio > Veracruz > Crónica política. Nuestra voz se sumó a la de varios colectivos de (...)

Crónica política. Nuestra voz se sumó a la de varios colectivos de familiares en el estado de Veracruz que luchan por la presentación con vida de sus seres queridos

Domingo 26 de marzo de 2017, por Veracruz

Crónica política. Nuestra voz se sumó a la de varios colectivos de familiares en el estado de Veracruz que luchan por la presentación con vida de sus seres queridos

Es el día 22 de marzo y en los diarios se da cuenta de la conferencia de prensa que se realizó en el marco de la Jornada nacional de lucha: Las víctimas del terrorismo de Estado son del pueblo, no desistiremos ¡HASTA ENCONTRARLOS!, donde expusimos los motivos que nos llevó a la necesidad de desarrollar esta actividad política ante el incremento exponencial de la desaparición forzada y la ejecución extrajudicial como la objetivación de la política del terrorismo de Estado en México.

Nuestra voz se sumó a la de varios colectivos de familiares en el estado de Veracruz que luchan por la presentación con vida de sus seres queridos y que han denunciado la nula respuesta de las autoridades estatales en la investigación y procuración de justicia, el ejemplo más nítido se encuentra en las declaraciones del titular de la Fiscalía General del Estado (FGE) Jorge Winckler, quien sin tener un estricto rigor científico de los protocolos de identificación sostiene que algunos de los restos encontrados en el fraccionamiento Colinas de Santa Fe corresponden a personas detenidas desaparecidas de Querétaro.

El gobernador del estado Miguel Ángel Yunes Linares se apresura a respaldar al fiscal y sostiene para los medios de comunicación que se hace un mal juicio del trabajo del funcionario, y afirma que le “pese a quien le pese, el fiscal está bien”. Lo único que refleja este tipo de declaraciones es que desde las estructuras gubernamentales están más preocupados por “aclarar” con verborrea oficial cada dicho de las organizaciones y colectivos de familiares, en lugar de demostrar con hechos su “buena” voluntad que demagógicamente dicen tener.

Existe un criterio para afirmar que el Estado es quien comete por comisión, omisión o aquiescencia los crímenes de lesa humanidad, es decir, es imposible ocultar la participación de alguna corporación policíaca en cada crimen en cada crimen de esta naturaleza, es tanto el cinismo y la impunidad que ya no les inmuta cuidar las “formas”. Uno de los ejemplos más ilustrativos es la desaparición forzada de cinco jóvenes en Tierra Blanca, a quienes los detiene una patrulla de la policía estatal y posteriormente son entregados a un grupo de “civiles”.

Estos grupos de “civiles” actúan en esencia desde la lógica del paramilitarismo, puesto que es inverosímil que puedan actuar con tanta impunidad sin cobijo y amparo de las estructuras del Estado mexicano, además, no son pocas las investigaciones que documentan con testimonios objetivos la relación que existe entre éstos y los cuerpos represivos. Son elementos militares quienes aportan su testimonio de los crímenes que se cometen como política de Estado, les resulta difícil vivir con el sentimiento de haber cometido crímenes de lesa humanidad.

La actitud de quienes están al frente de las estructuras de gobierno debería ser otra, si en verdad quieren coadyuvar en llevar la justicia para todas las víctimas de tan abominables crímenes, sin embargo, con declaraciones como estas, lo que queda claro es que forman parte de toda una red de complicidad que debe garantizar impunidad a los autores materiales, quienes son los responsables de objetivar el terrorismo de Estado.

Al presentar el libro ¿Dónde los tienen? Gira nacional. Desaparición forzada en México: Caso Gabriel Alberto Cruz Sánchez y Edmundo Reyes Amaya; un crimen de lesa humanidad en la Academia Mexicana de Educación A. C. en la ciudad de Xalapa, se lograron varios resultados positivos, el primero es que nuevamente la solidaridad nos vuelve a reunir esfuerzos organizativos que nos dimos cita en el año 2015 para realizar la Gira nacional y que son estos mismos quienes ven objetivado parte de su voluntad en este material bibliográfico.

El Frente Nacional de Lucha por el Socialismo al presentar el libro nuevamente hizo énfasis en la importancia conceptual, política y metodológica del libro, porque recoge no sólo la experiencia mediática del recorrido de la gira, sino que expone la concepción política que se hace del fenómeno, el cual se define como una política sistemática, recurrente, generalizada del terrorismo de Estado, cuyo expresión se manifiesta en los miles de detenidos desaparecido de manera forzada y ejecutados extrajudicialmente en nuestro país.

El cometido de la desaparición forzada en México tiene origen en el Estado mexicano y se extiende más allá de los periodos de gobierno, por lo tanto, es política transexenal. El caso de los luchadores sociales Gabriel Alberto Cruz Sánchez y Edmundo Reyes Amaya, al cumplirse casi una década de que se les mantiene en esta condición inhumana, comprueba lo acertado de esta tesis, porque a pasar de existir recomendaciones de derechos humanos, resoluciones judiciales e investigaciones que señalan a autoridades federales, los responsables continúan en la impunidad.

Representa una experiencia metodológica porque expresa una ruta jurídica y política a la que los familiares de detenidos desaparecidos, agrupados en colectivos pueden seguir para obtener algunos beneficios que aún permite el acotado estado de derecho mexicano. Esto se desprende de la participación de la compañera María Elena del colectivo Buscando a nuestros desaparecidos y desaparecidas Veracruz, quien, en su momento, expresó, “el libro está dedicado a nosotros, a los familiares de los detenidos desaparecidos, porque nos abre camino por donde podemos transitar”.

La compañera hizo un señalamiento muy puntual, sin la solidaridad de todo el pueblo, ningún colectivo o familiar podrá salir avante en esta desigual lucha contra toda la maraña burocrática y leguleya que representa el Estado mexicano, se requiere de la participación de todos los que somos víctimas, ya sea de manera directa o indirecta, porque a todos nos identifica nuestra condición de explotados y oprimidos.

El Colectivo Acero de la Facultad de Ciencias y Humanidades de la Universidad Veracruzana, encaminó su participación en ese mismo sentido, porque fueron uno de los esfuerzos que coadyuvaron para la realización de la Gira en 2015 y al igual que todos nosotros, vemos coronado con creces la modesta participación en el libro ¿Dónde los tienen?

En una entidad federativa muy lacerada por estos crímenes es común observar cómo hay muestras de solidaridad, que existimos voluntades que nos negamos a ser permanentemente presas de la violencia institucional, de tal manera que hacemos el esfuerzo que sea necesario por sumar a desenmascarar la esencia represiva del régimen neoliberal y los gobiernos en turno.

Algunos medios de comunicación asistieron a este llamado, porque fue en esta misma sede donde se dio la conferencia de prensa durante la Gira y que recordamos, con un sentimiento de dolor, el hecho de que fue en este espacio donde conocimos al fotoperiodista Rubén Espinosa, quien muy solidariamente dio cobertura de este evento político; una víctima más de la ejecución extrajudicial y que perversamente el Estado quiere endosar a actos circunstanciales o pasionales.

Necesario es señalar que el gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares envió a una persona, pero que sólo se identificó como de Política Regional, no obstante, al preguntarle cual era el objeto de su asistencia o con qué intención asistía no dio ninguna respuesta, en cambio, optó por mantenerse al margen, sin ingresar el espacio de la presentación, pero permaneciendo en las inmediaciones del lugar.

Nuevamente el hostigamiento se hace presente, cuando las organizaciones populares denunciamos la realidad lacerante en amplias regiones del país, lo que nos deja claro una cosa, desde el Estado mexicano en contubernio con las autoridades locales, pretenden hacernos desistir de nuestra jornada nacional, como ya lo intentaron con la ejecución extrajudicial de nuestro compañero Humberto Morales Sántiz el pasado 28 de febrero, sin embargo, ningún crimen detendrá nuestro avance ni hará callar nuestra voz de denuncia.

Se equivoca el Estado mexicano si cree que con abrir más grande la herida logrará poner freno a la voluntad de lucha que paulatinamente rompe con el muro de temor, que se abre paso a través de un pueblo lastimado, pero que en cada herida, en cada hermano, padre, madre…, que es arrebatado por la desaparición forzada o la ejecución extrajudicial, se reconoce a un hermano de clase, por lo que el dolor se convierte en indignación, y cada víctima es una razón para luchar.

Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (FNLS)

¿Un mensaje, un comentario?

moderación a priori

Este foro es moderado a priori: su contribución sólo aparecerá una vez validada por un/a administrador/a del sitio.

¿Quién es usted?
Su mensaje

Para crear párrafos, deje simplemente líneas vacías.