El fenómeno inflacionario en Chiapas

Chiapas 24 de julio de 2022

El fenómeno inflacionario en Chiapas

Los pobres del campo y la ciudad padecemos las consecuencias del fenómeno inflacionario que afecta el consumo en general, y en particular el de los artículos de primera necesidad, lo que se traduce en más pobreza y miseria para el pueblo chiapaneco.

El aumento súbito de precios ocurre con mayor frecuencia, este hecho afecta desde servicios básicos hasta en los alimentos, esto se traduce en dificultades para la garantía plena de los derechos humanos y constitucionales del pueblo, la inflación como vemos tiene graves consecuencias políticas y sociales para los trabajadores del campo y la ciudad.

El aumento abrupto de combustibles como gas, gasolinas y diésel, fomenta el aumento de precios, pero también la especulación, es decir, usan a la pandemia, la guerra entre Rusia y Ucrania como causales absolutos de dicho problema, cuando en el fondo es la prueba precisa de cómo se manifiesta la crisis del capitalismo y lo inoperable de este modo de producción criminal.

Con el incremento en el precio de los combustibles se elevan también el de los alimentos, medicamentos, pasaje, etcétera, esta situación es notable porque en el transporte público, en la calle, en los mercados se aprecia incertidumbre, impotencia, indignación, porque para sobrevivir no son suficientes los ingresos de las familias proletarias.

Por ejemplo, se anunció ya un nuevo aumento en el precio de la tortilla, este hecho nos conduce a preguntarnos ¿por qué? La respuesta está entender el contexto internacional, los intereses en juego de la oligarquía y los de los políticos de oficio en México.

México importa granos de los Estados Unidos, los compra a un alto precio, el peso depende del dólar, pero la moneda mexicana ha perdido valor adquisitivo, por eso los especuladores lucran con ese fenómeno para aumentar su precio, como es un alimento básico, los empresarios hacen todo cuanto sea necesario para no perder, mientras los trabajadores a golpe de hambre tenemos que comprarlas.

Las principales empresas productoras de materia prima para las tortillas son quienes tienen la capacidad de definir los precios de ese alimento, si le sumamos la inversión en combustibles, así poco a poco los especuladores tienen el pretexto para aumentar su precio.
El ejemplo nos indica un hecho, lo políticos de oficio nos podrán decir que la pandemia u otra causa se debe la inflación o como ocurre en la entidad, diputados locales como federales dicen apoyar a los “más vulnerables”, sin embargo, en Chiapas, guardan silencio por este fenómeno, en cambio, hablan a más no poder de los “buenos” deseos del gobierno chiapaneco como el federal porque la entidad se desarrolle, eso es demagogia pura.

Gobierno del estado, presidentes municipales, entre otros políticos de oficio tienen garantizada su existencia, las familias pobres del campo y la ciudad viven al día, del ambulantaje, de salarios de hambre; esta situación nos indica un hecho, abundancia e indolencia de los políticos por un lado y por el otro lado hambre, miseria, demagogia, muerte por la violencia institucional y la descomposición social para los miles de chiapanecos en situación precaria.

Resulta inadmisible observar a políticos de oficio de Chiapas exponer sus frivolidades en los medios de comunicación mientras los asalariados, el ambulante, jornaleros y campesinos pobres deben sobrevivir al día, la alimentación en esas condiciones es cada vez más difícil para el pueblo.

El alza acelerada de los precios de las mercancías no es un problema único en la entidad, es un fenómeno generalizado, ocurre en toda la República Mexicana como en el resto del mundo, pero, pocos argumentan la causa de la inflación, ésta es la crisis capitalista, las contradicciones de concentrar riqueza en pocas manos mientras los millones de asalariados perciben ingresos de hambre.

Los grandes empresarios son los principales ganadores con el alza de precios, porque es la oligarquía la que tiene la capacidad de definir precios, en sus manos está la distribución de mercancías en el mundo y en el país, por tanto, en Chiapas. Por esa razón, los precios de los artículos de primera necesidad dependen de ellos, porque el Estado mexicano se sujeta a las órdenes empresariales y pone a su disposición las leyes de su estado de derecho.

La solución al problema de la inflación no está en manos del gobierno mexicano, porque nuestro país depende de la política monetaria y los planes económicos del imperialismo norteamericano, por eso, el Banco de México al imprimir más papel moneda, crea falsas esperanzas en el pueblo, porque crea la idea de poseer más dinero, mientras las mercancías, no paran de aumentar su precio y a la vez se devalúa más nuestra moneda.

El hecho real de la moneda nacional es su pérdida de capacidad adquisitiva, se compra poco con más dinero. Solucionar este fenómeno no vendrá ni de la “cuarta transformación” ni de cualquier otra sigla partidista que mantenga inamovible la lógica capitalista, el combate a la inflación implica el combate al capitalismo y esta lucha pasa por la transformación de nuestra sociedad, pasa por la unidad del pueblo en torno a la lucha por el socialismo.

Desde estas líneas, como Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (FNLS), invitamos al pueblo a organizarse de manera independiente y combativa, sólo así comprenderemos la necesidad de impulsar el socialismo, además, en colectividad la superación de las adversidades se da en mejores condiciones.

De los gobiernos o políticos de oficio recibiremos promesas, demagogia, apoyos con fines electorales para favorecer intereses de grupo, por esto, es indispensable adquirir conciencia de la necesidad de luchar para mejorar nuestras condiciones materiales de vida y exigir el respeto a nuestros derechos políticos y constitucionales.

¡Por la unidad obrero, campesino, indígena y popular!
Frente Nacional de Lucha por el Socialismo