La UNION CAMPESINA POPULAR FRANCISCO VILLA y la OCEZ-Casa del Pueblo, integrantes del FRENTE NACIONAL DEL LUCHA POR EL SOCIALISMO.

San Cristóbal de Las Casas, Chiapas a 30 de Noviembre de 2012.

AL PUEBLO DE CHIAPAS.

Ante el recrudecimiento de la represión masiva y selectiva como política de Estado que a lo largo y ancho del país se da contra las comunidades organizadas y no organizadas, que buscan la defensa de sus territorios para el bien común; así, el Estado intenta a cualquier costo reprimir, se crean y mantienen grupos paramilitares en nuestras comunidades, intentan despojarnos de nuestras tierras y golpear a las organizaciones que conformamos el Frente Nacional de Lucha por el Socialismo, como lo exponemos a continuación en el caso de los compañeros de la Unión Campesina Popular Francisco Villa y la Organización Campesina Emiliano Zapata.

Como campesinos de diferentes ejidos, provenientes de Francisco I Madero, Libertad Pajal, entre otros todos pertenecientes del municipio de Ángel Albino Corzo. Desde 1993 nos agrupamos como organización para solicitar tierras acaparadas por caciques de la región, entre ellas el predio El Berlín antes conocido como La Flor, en el año de 1994 firmamos sendos minutas de trabajo con los gobiernos Estatal y Federal y funcionarios Agrarios.

El proceso encaminado a una solución favorecía los intereses de los solicitantes, al ver amenazada sus intereses los caciques de la región, iniciaron una intensa campaña de desprestigio, calumnias y difamaciones que se tradujo en represiones crueles, persecución, encarcelamiento y asesinatos de compañeros.

El despojo legalizado y violento en la región de la sierra de nuestro Estado es una práctica histórica que se manifiesta hasta nuestros días, con funcionarios corruptos, ligados a intereses políticos y económicos de caciques más recalcitrantes, responsables de tantos asesinatos de campesinos que han defendido sus tierras.

En el caso de nuestra agrupación, que nos hemos dispuesto a seguir resistiendo como organización, se debe a la apremiante necesidad de adquirir un pedazo de tierra donde cultivar, somos avecindados y pobladores que jurídicamente la ley agraria no nos permite adquirir un pedazo de tierra ejidal ni mucho menos el derecho de participar.

Entonces, tenemos que organizarnos para reiniciar el proceso encaminado a adquirir las tierras que fueron solicitadas y afectadas hace 17 años, solo que nos replegamos debido a la acción represiva y sangrienta que fuimos objeto en el año de 1995-96. Esta vez nos propusimos trabajar hace tres meses el predio El Berlín, nos hemos propuesto recurrir a los registros de propiedad para indagar acerca del propietario y permitirnos estables acuerdos de compra venta, apostamos al diálogo con acuerdos tangibles y nos permitan la adquisición por la vía legal.

Grupos vivales que el año pasado se le permitió cosechar el café, ahora se presentan con lujo de violencia argumentando ser propietarios del predio con actitud por demás sospechoso, citándonos a altas horas en la cabecera municipal para dialogar con supuestos autoridades agrarias.

Éste grupo es encabezado por Bonofilio López González pertenecientes al municipio de Monte Cristo, tiene la intención de provocar represalias en contra nuestra, ligados a caciques y que pueden desembocar en asesinatos de compañeros.

Conocedores de las prácticas de grupos de choque, sabemos con esas provocaciones se intensificarán las agresiones ya que se avecina la cosecha de café, acostumbrados hacer acciones ilícitas son capases de todo, por lo que pedimos a las autoridades que nos den respuestas claras por la solución de nuestra demanda.

De nuestra parte por lo difícil que sea nos mantenemos unidos con plena disposición en acudir al llamado de la autoridad, para evitar actos provocativos; con la moral en alto resistiremos, en el lugar de los hechos están presentes nuestras esposas e hijos por lo que no se descarta establecer nuevo asentamiento poblacional.

Cese a la provocación del grupo de choque que se hace llamar organización “Grano de oro”
De este mismo modo, los intentos del Estado Mexicano por justificar le represión hacia nuestras comunidades en el que se ha utilizado a grupos paramilitares que han asesinado, detenido desaparecido a compañeros, con un claro objetivo, desmembrar y hacer que desistamos de nuestra lucha como comuneros.

Por lo que desde hace varios meses nuestra organización OCEZ, integrante del FNLS, hemos venido denunciando las distintas agresiones a nuestros compañeros Comuneros de la OCEZ, por parte del grupo paramilitar “Escuadrón de la muerte”, quienes con apoyo del cacique Jesús Alejo Orantes Ruiz y del gobierno de Juan Sabines, han intentado desmembrar a nuestra organización, mediante desalojos violentos en coordinación con la fuerza pública, desapariciones forzadas de compañeros, detenciones extrajudiciales, intentos de asesinatos y varias órdenes de aprehensión, represión que ha sido una constante a los largo de nuestra historia de lucha.

A raíz de las agresiones del 25 de septiembre contra la autoridades comunales miembros de la OCEZ, los comuneros hemos decidido en asamblea con mayoría absoluta y por unanimidad el desconocimiento de las 49 personas que conforman el grupo paramilitar “Escuadrón de la muerte”, por lo que acudimos al Registro Agrario Nacional en distintas ocasiones para proceder a la cesación de los derechos agrarios de los paramilitares, mediante la entrega del acta de asamblea que da fe de nuestra decisión. Asimismo como muestra de nuestra voluntad política, apelando al estado de derecho que tanto pregonan los gobiernos en turno, acudimos a una audiencia con el aún Secretario de Gobernación en la que firma una minuta de acuerdo, comprometiéndose a gestionar ante el Registro Agrario Nacional, abreviar el plazo de sesenta días para emitir la resolución respecto de nuestra demanda.

Con el paso del tiempo, vemos que el gobierno sólo necesitaba un pretexto para ganar tiempo y reiniciar las agresiones a través de los paramilitares. En respuesta a nuestras justas demandas, el gobierno de Juan Sabines Guerrero toma como salida, la militarización de nuestra comunidad de Venustiano Carranza, con el despliegue policiaco militar que dio inicio el lunes 26 de noviembre de 2012, alrededor de las 6 de la tarde, acción que le permite coberturarse y movilidad al grupo paramilitar.

En ese contexto se da la muerte de Luis Ángel Hidalgo Vázquez, un crimen cometido por personeros del gobierno, mercenarios a sueldo, y que ha fungido como pretexto para desatar la represión masiva y selectiva de nuestros compañeros; para intensificar la presencia de las fuerzas castrenses
Con este hecho se confirma una vez más, que su intención es reprimir a nuestra organización -y lo que en esta semana ha salido a la vista de todos-, es dar protección a este grupo paramilitar a través de la presencia y de la acción conjunta con estos cuerpos represivos, señalando a varios compañeros de nuestra comunidad para su detención, encarcelamiento o asesinato extrajudicial.

El gobierno de Juan Sabines Guerrero, además de respaldar todas las acciones de este grupo paramilitar, permitiendo las agresiones, cateos, tratan de incriminar a compañeros de diferentes barrios con la siembra de casquillos de distintos calibres en sitios y parcelas, cartuchos percutidos, de varios de los comuneros que integran la OCEZ-FNLS.

Ha instalado un estado de sitio en nuestra comunidad con la presencia de la policía estatal preventiva, el Ejercito y la MARINA, ubicando sus campamentos en las entradas principales conocido como la Cruz Larga y la Clínica, haciendo patrullajes las 24 horas del día en toda la comunidad con la firme intención de intimidar y crear el terror en nuestra comunidad.

La presencia de los cuerpos castrenses corresponde además, a la criminalización de la pobreza y protesta que hacemos los comuneros desde que hemos decido abanderar de manera organizada la defensa de nuestras tierras comunales, a raíz de esto, los distintos regímenes han querido despojarnos ya sea de forma legal o a través de la fuerza policiaca y castrense, reprimiendo, como ocurrió el 11 de Mayo de 1976, en el año 1994, en 2001, teniendo como resultado varios de nuestros compañeros muertos, desaparecidos y presos.

1. Por todo esto, repudiamos la intensificación de la presencia militar en nuestra comunidad de Venustiano Carranza, que a lo largo del sexenio del fascista Felipe Calderón instaura un Estado Policiaco Militar, como política de Estado con el objetivo de desarticular el recurso del pueblo oprimido, la organización democrática e independiente.

2. Exigimos el castigo y desarticulación del grupo paramilitar “Escuadrón de la Muerte”

3. Retiro inmediato del Ejército, de la MARINA y la Policía Estatal. No son bienvenidos en la comunidad, sobretodo porque existen registros en la CNDH de la participación de éstas fuerzas castrenses en delitos de lesa humanidad, violación a derechos humanos, y ese antecedente incrementan los riesgos de represión hacia nuestros compañeros comuneros.

4. Cancelación de ordenes de aprehensión y expedientes incriminatorios hacia los que integramos la OCEZ FNLS.

5. Exigimos la inmediata resolución del Registro Agrario Nacional para la privación de los derechos agrarios de las 49 personas que integran el grupo paramilitar.

6. Respeto a las autoridades de nuestra comunidad que fueron elegidos en asamblea, como máxima autoridad de la Comunidad.

7. Exigimos la legalización de 1420 hectáreas en los márgenes del Río Blanco, municipio de Venustiano Carraza.

Responsabilizamos al cacique Jesús Alejo Orantes Ruiz, a los 49 paramilitares, a Juan Sabines Guerrero, a Noé Castañón León, a Felipe de Jesús Calderón Hinojosa de cualquier agresión física y sicológica hacia nuestros compañeros de la OCEZ, y de todos los que integremos el Frente Nacional de Lucha por el Socialismo.

Hacemos un llamado a todos los organismos defensores de los derechos humanos a que estén atentos de la situación que prevalece en la comunidad de Venustiano Carranza y de cada una de las nuestras comunidades que integran el FNLS.

¡Fuera policías, militares y marinos de Venustiano Carranza!

FRENTE NACIONAL DE LUCHA POR EL SOCIALISMO.