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Posicionamiento ante las tergiversaciones de la marcha del 30 de mayo en la CDMX, por parte de algunos medios de comunicación

Miércoles 5 de junio de 2019, por Puebla

H. Puebla de Zaragoza a 4 de junio de 2019

A los medios de comunicación
A los organismos defensores de los derechos humanos
A las organizaciones populares e independientes
Al pueblo en general

El 30 de mayo del presente año como Frente Nacional de Lucha por el Socialismo, culminamos con una marcha en la Ciudad de México (CDMX) la jornada nacional de lucha que impulsamos en diferentes estados del país donde tenemos presencia, cuya consigna fue: Perdón ¡Nunca!, Olvido ¡Jamás!; dicha jornada se enmarcó en la Semana Internacional del Detenido Desaparecido, convocada por La Federación Latinoamericana de Asociaciones de Familiares de Detenidos-Desaparecidos FEDEFAM.

La lucha por la presentación con vida de todos los detenidos-desaparecidos por motivos políticos ha sido una demanda permanente que como organización hemos impulsado desde principios de los años ochenta a través de jornadas de denuncia, actividades políticas y acciones políticas de masas y ya desde hace doce años por la presentación con vida de los dos revolucionarios Gabriel y Edmundo. Jornadas de lucha que hemos realizado junto con familiares de las víctimas de desaparición forzada por motivos políticos y sociales, contando también con la importante participación de organizaciones populares independientes y personalidades progresistas.

Dichas jornadas se sustentan política y jurídicamente en la libertad de ejercer los Derechos Humanos y Constitucionales, en la libre expresión de ideas, organización, manifestación pública y a la protesta, implementando una práctica política en forma honesta, consecuente y combativa, como uno de los principios de nuestra organización popular e independiente, FNLS.

La respuesta del Estado burgués mexicano ha sido y continúa siendo en pleno siglo XXI y en tiempos de “transformación”, no atender nuestras justas demandas, que en este caso es, ¡Presentación con vida de los detenidos desaparecidos de ayer y hoy!; al mismo tiempo, ejerce la represión en todas sus modalidades hasta el cometido de crímenes de lesa humanidad contra nuestros militantes, con el único propósito de acallar nuestra exigencia.

La actual represión se repite en su selectividad, por motivos políticos, a la ejecutada en la década de los setenta: persecución, imputación, criminalización, detención arbitraria, tortura, ejecución extrajudicial y detención-desaparición forzada contra los integrantes de nuestra organización así como de las organizaciones solidarias y fraternas con nuestro proyecto y las demandas que enarbolamos. No obstante el carácter exponencial del cometido de crímenes de Estado en las pasadas administraciones continúa en ésta.

Medidas de carácter fascista perpetradas por agentes del Estado bajo el mando de las distintas, aunque en esencia iguales, administraciones federales en turno, fueran priístas, panistas, perredistas o la actual del partido MORENA, sin que hasta ahora se haya detenido a uno solo de los responsables de tan deleznables crímenes.

Las denuncias escritas emitidas por nuestros compañeros del FNLS en la CDMX y de Chiapas, dan cuenta del proceder represivo de las administraciones de Claudia Sheinbaum y de Rutilio Escandón Cadenas quienes durante todo la jornada que comprendió del 1 al 30 de mayo, se hostigó y reprimió a los integrantes de nuestra organización, a pesar de la denuncia constante que se realizó en medios de comunicación, del cual tuvo conocimiento el ejecutivo federal, por lo que podemos afirmar que existió aquiescencia de éste. El objetivo era impedir en forma violenta nuestro ejercicio de informar y denunciar sobre los crímenes de Estado en el país, como los es la desaparición forzada, crimen que no prescribe y por ello es responsabilidad del ejecutivo en turno resolver las desapariciones forzadas del pasado, así como las que están ocurriendo en su sexenio.

El jueves 30 de mayo, ya culminada la marcha, un agente del gobierno de la CDMX, quien dijo ser de “concertación” más no quiso dar su nombre, empezó a tomar fotografías del rostro de los compañeros y de las placas de los vehículos. Cabe aclarar, la susodicha instancia de concertación tiene la tarea policiaca de recabar información de críticos o disidentes del régimen, utilizada después para crear expedientes incriminatorios u objetivar persecución, prisión, ejecución extrajudicial o desaparición forzada, por ello la gravedad de tomar fotografías a sus rostros.

Podría parecer una tarea policíaca de rutina, sin embargo, es parte del accionar sistemático de agentes de gobierno de la CDMX en contra de nuestro FNLS como lo muestran las recientes agresiones en los paraderos y entradas del transporte colectivo Metro; anteriormente en febrero, los compañeros fueron objeto de persecución y hostigamiento al ser fotografiados por orden de Claudia Sheinbaum, al acudir a las Oficinas del Alto Comisionado para la Defensa de los Derechos Humanos de la ONU.

En la pasada administración de la CDMX que también se autodenominaba de izquierda, fue tarea recurrente de sus agentes, el seguimiento y toma de fotografías que posteriormente se tradujo en el intento de ejecución extrajudicial el 7 de noviembre de 2015 en la delegación Iztapalapa, hoy alcaldía, contra cinco compañeros, uno de ellos, Rubicel Hernández, quien a causa de las lesiones de bala en la columna vertebral quedó con paraplejía; en dicha ocasión, el criminal vociferó antes de disparar “con que muchos huevos”, el 30 de mayo el agente de “concertación” verbaliza un mensaje similar “se sienten muy chingones”.

La lista de crímenes en contra organización nacional no para, entre ellos se encuentran; en Chiapas las ejecuciones de Héctor Sántiz López en 2015 y del niño Humberto Morales Sántiz en 2017, así como la detención-desaparición de Fidencio Gómez Sántiz en 2016; en Morelia Michoacán el atentado contra nuestra compañera Rosa Hernández Reyes en 2014, al ser embestida de forma premeditada junto a normalistas y universitarios, por Martín Gerardo González Montaño quien iba armado y a bordo de un vehículo con placas extranjeras; actualmente Rosa se encuentra con graves secuelas que la obligaron a dejar escuela, reducir actividad diaria y su participación política.

Es una escalada represiva, instrumentada desde el Estado, hasta llegar a los crímenes enumerados, a partir de que como organización de forma conjunta con los familiares de los dos revolucionarios Gabriel Alberto Cruz Sánchez y Edmundo Reyes Amaya popular exigimos la presentación con vida.
El actuar pro-fascista del Estado cuenta con la colaboración plena de medios de comunicación y periodistas que por omisión o comisión tergiversan, imputan y criminalizan la forma de lucha que desarrollamos en el FNLS. Lo demuestran algunas notas periodísticas en referencia a la marcha del pasado 30 de mayo en la Ciudad de México.

«Un grupo de encapuchados aprovechó la oportunidad de “pintarrajear” las fachadas de diversos inmuebles ubicados sobre el Paseo de la Reforma…»

Términos y expresiones que dolosamente pretenden criminalizar y descalificar la protesta popular; declaramos que quienes plasmaron frases con contenido político en las paredes son compañeros integrantes de nuestro frente, encargados de la comisión de información y denuncia. El cubrirse el rostro es para protección personal y colectiva, porque la experiencia nos ha enseñado que al enfrentar de forma consecuente y combativa al Estado, nos coloca como blanco de una imputación judicial hasta ser objeto de un crimen de lesa humanidad.

“Pintarrajear” es rayar sin razón y lo que se plasmó en las paredes del capital privado son exigencias populares de respaldo nacional: LA PRESENTACION CON VIDA DE LOS DETENIDOS DESAPARECIDOS Y JUICIO Y CASTIGO A LOS CULPABLES. ¿Es acaso un delito exigir justicia? Es la respuesta creativa y combativa del movimiento popular al cerco informativo y la manipulación de la realidad que se instrumenta desde el monopolio de la comunicación como parte del aparato ideológico de la burguesía.

Qué calidad humana puede tener el periodista y medio de comunicación al sentir dolor por el “daño” que se le hace a un inmueble del depredador capital nacional o transnacional por escribir una consigna que denuncia los crímenes de Estado y que por el contrario, ante el dolor de los familiares de víctimas de crímenes de lesa humanidad se rige con indiferencia y autocensura, a pesar de que su propio gremio es objeto de ejecuciones extrajudiciales y desaparición forzada.

«Encapuchados con palos y hasta con machetes intentan romper marcha por los desaparecidos en CdMx.»

La autodefensa personal y de las masas populares es un derecho humano y constitucional, más aún cuando se es objeto de represión sistemática por parte del Estado, preguntamos a los alarmados periodistas ¿Qué debe hacer el pueblo cuando la única respuesta es el aparato policíaco-militar pertrechados con escudos, toletes y gases?..

«Con aerosol y plantillas en mano, los rijosos dejaron huella con estampados en color negro y rojo con la imagen del caudillo Emiliano Zapata en edificio del Poder Judicial de la Federación ubicado sobre Bucareli.»

Estos calificativos incriminatorios son los que van permeando el terreno para que el Estado burgués actúe en nuestra contra, a pesar de que los mismos hechos contradicen la nota, porque volvemos a interrogar ¿Qué “rijosos” reivindican al héroe nacional Emiliano Zapata y exigen demandas políticas? No hay comparación entre un rijoso y un activista político.

«Durante la protesta realizada hoy en la Ciudad de México se registraron conatos de enfrentamiento entre los encapuchados y el resto de los manifestantes, quienes optaron por continuar su marcha hacia el Zócalo.»

Periodistas y medios de comunicación se erigen como jueces para sentenciar cuáles son las formas y expresiones de protesta permitidas conforme a como lo impone el estado de derecho y la democracia burguesa. En ese perverso afán, fabricaron conflictos inexistentes durante el desarrollo de la marcha entre el contingente y los activistas encargados de la denuncia política y la seguridad, con intención de diluir la demanda central.

«Escribieron consignas como “Alto al terrorismo de Estado” y “Perdón ¡Nunca!, Olvido ¡Jamás!”»

¿A quiénes podría hacer daño esta necesaria exigencia del pueblo? Sólo a los perpetradores de este crimen. La detención-desaparición, ejecución extrajudicial son heridas que no cierran, que día tras día siguen lacerando a los sectores populares.

La actual junta administrativa federal, así como las locales del partido político de MORENA, actúan como sus antecesoras -priistas, panistas y perredistas- que durante las manifestaciones públicas, sobre todo si es de carácter popular e independiente, montan un operativo policiaco, así como de agentes vestidos de civil quienes acosan a los manifestantes para coartar sus derechos constitucionales; parte del despliegue policíaco es la cuadrilla de limpieza, que metros atrás del contingente de forma apresurada, va arrancando carteles, borrando consignas y demandas escritas en paredes.

Arrancar, borrar, destruir las demandas plasmadas en paredes, carteles y volantes son actos de autoritarismo que contradicen al propio discurso de quienes hoy gobiernan y se autoproclaman de izquierda, respetuosos de la constitución, de los derechos humanos, promueven la reconciliación mediante el “perdón sí y olvido no”. Borrar y destruir las reivindicaciones escritas y pegadas conducen al olvido que es el sendero para la impunidad.
Atentamente

¡Alto a la criminalización de la protesta popular!
¡Alto a la ejecución de crímenes de lesa humanidad!
¡Presentación con vida de todos los detenidos desaparecidos de ayer y hoy por el régimen!

¡Por la unidad obrero, campesino, indígena y popular!
Frente Nacional de Lucha por el Socialismo
FNLS

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